Últimamente estamos leyendo en los periódicos y viendo en las noticias de televisión que las autoridades federales de inmigración están haciendo enredadas y deteniendo a inmigrantes en cantidades nunca antes vistas. Cualquier inmigrante en los Estados Unidos puede caer en estos esfuerzos para hacer cumplir las leyes de inmigración en el país. La mayoría de estos detenidos o arrestados están en los Estados Unidos sin documentos y terminan deportados a su país. Otros tienen su residencia legal pero han tenido algún problema criminal en el pasado y a causa de eso, las autoridades de inmigración le empiezan un caso de deportación.
Ahora, el departamento de inmigración, la ayuda de una ley federal conocida como Sección 287(g) de la Ley de Inmigración y Nacionalidad (INA), las autoridades de inmigración están entrenando y usando policías de departamentos locales (de estados y ciudades) para hacer cumplir las leyes de inmigración. Esto es algo que nunca se vio en este país. Sección 287(g) se hizo ley en los Estados Unidos en 1996 como resultado del Acta de Reforma de Inmigración Ilegal y Responsabilidad Inmigrante (IIRIRA).
Sección 287(g) autoriza al Secretario de Seguridad de la Patria para entrar en acuerdos con los estados y las agencias policiales locales, lo que permite policías designados para llevar a cabo la aplicación de la ley de inmigración a condición de que los policías locales encargados de hacer cumplir la ley reciban entrenamiento adecuado y bajo la supervisión de oficiales federales del Departamento de Inmigración y Aduanas (ICE).
Bajo la sección 287(g), estos policías estatales y locales designado y entrenados por ICE pueden, durante su trabajo y actividades regulares como policía, identificar, procesar y en muchos casos, detener a un inmigrante que ellos sospechan de haber violado los leyes de inmigración. Algo tan simple como una parada por infracción de ley de tráfico puede resultar en detención federal.
En los últimos años, miles han sido detenido y/o deportados de esta manera.
Ahora más que nunca el inmigrante se tiene que cuidar si existe la posibilidad de que tenga problema con el Servicio de Inmigración (USCIS). Debe de consultar con un abogado de inmigración para ver si hay alguna manera de arreglar papeles o, si es residente legal, de evitar un caso de deportación. No se demore. En muchos casos hay procesos legales que se pueden usar para evitar la deportación.